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Mostrando las entradas etiquetadas como Las locuras de Marita
PARTE III La idea de retomar su sueño, provocó en Martirio una inquietud por considerarse una mujer de edad avanzada. Mirarse en el espejo, era una de sus manías. Las veces que se observaba notaba una arruga más para su colección. Su esposo la animaba, le compraba utensilios de cocina muy sofisticado y a cada uno, le agregaba una nota. Por ejemplo, en un batidor eléctrico le colocó como nota: "espero que me cubras con un merengue sabor a vainilla, para que te comas este postre. Besos mi amor". Martirio no paraba de reír y comentar lo loco que parecía estar su esposo. Para ella, Manuel no tenía reparo.  Poco a poco, Martirio inició la búsqueda de una escuela de cocina. Deseaba aprender de buenos maestros. Conocía muchos chef de renombres en su país. Uno de ellos posee una escuela muy prestigiosa. Tiene fama de ser exigente y pedir creatividad en las preparaciones de sus estudiantes. Su lema es: "Quién aprende a cocinar, domina el arte de cr
PARTE II Ver la expresión de Consuelo al probar su comida, fue un placer. Martirio notó cómo su amiga cerraba los ojos para saborear cada bocado. Suponía lo que habría de sentir, y decir. Sus colaboradoras, también disfrutaron de la comida y una de ellas comentó: -Señora Martirio, usted cocina sabroso. Aunque no esta bien que esté en esto. Para eso estamos mi compañera y yo, para servirle. Martirio se sintió complacida, mientras que Consuelo, estaba extasiada con la comida que no prestaba atención al comentario de la chica. De repente, Consuelo termina su comida y voltea en busca de su amiga. Sin más preámbulo le notifica:  -¡Es lo mejor que he comido!. ¿Desde cuándo sabes de cocina?, tienes talento amiga. Martirio respondió con una sonrisa: -Desde que era joven. Quise especializarme y no era lo indicado para mi. Te cuento que nunca cociné, dibujaba todo lo que agregaría si lo hiciese. Así fue que pude prepararles esta comida. Consuelo quedó so
PARTE I La nostalgia de ver partir sus años mozos le deja un sabor amargo a Martirio. Apenas se resigna a ver en sus imágenes fabricadas lo que pudo ser, si tan solo hubiese tenido el valor para decidir por ella misma. Caracas 29 de Enero de 1962,  se hace constar públicamente y en los diarios más prestigiosos del país que la joven Martirio Eugenia Martínez Galiano contrajo matrimonio con el joven economista Manuel Antonio Salmiento Vegas. La unión fue merecedora de halagos y dedicatorias en páginas sociales.  El padre de Martirio no escatimó en gastos para celebrar por todo lo alto el matrimonio de su única hija.  Martirio estaba feliz de contraer nupcias y dejar el hogar de sus padres. Un viaje a Europa fue el detalle perfecto que encontró Manuel para sellar la unión cuerpo a cuerpo. De esta unión nació Francisco Alfonso y Alejandra María. Desde muy pequeña Martirio fue criada para ser la "esposa ideal"; no importaba sus ideales; la prioridad era atend